🌐 Tecnología y Agricultura de Precisión para Gestión de Nutrientes: Optimizando la Fertilidad del Suelo
La tecnología y agricultura de precisión para gestión de nutrientes es un conjunto esencial de herramientas diseñadas para manejar la variabilidad del suelo y los cultivos. En primer lugar, el objetivo es optimizar el rendimiento de las explotaciones aplicando la dosis correcta de insumos, como los fertilizantes, en el lugar y momento adecuados. Por consiguiente, esto no solo mejora la rentabilidad económica, sino que también disminuye el impacto ambiental.
Paso 1: Determinación de la Variabilidad en el Campo (Mapeo)
El manejo sitio-específico de nutrientes comienza por identificar y mapear la variabilidad dentro de la parcela. De esta forma, se justifica la necesidad de un tratamiento diferenciado. Las principales herramientas para este fin son:
- Muestreo de Suelo Georreferenciado: Es el método más común para determinar la variabilidad de nutrientes. Por ejemplo, las muestras se toman con coordenadas GPS conocidas, lo que permite la creación de mapas de fertilidad. Además, el muestreo inteligente define «zonas de manejo» homogéneas basadas en información previa (como mapas de rendimiento o topografía) para guiar la toma de muestras, aprovechando así la información existente.
- Sensores y Mapas de Suelo: Diversos mapas ayudan a delimitar las zonas de manejo. Los mapas de rendimiento (con al menos tres años de historial) son fundamentales. Así mismo, los Mapas de Conductividad Eléctrica (CE) estiman la variabilidad en la textura del suelo, lo cual es una guía útil para la gestión de nutrientes.
- Teledetección: El uso de drones y satélites permite generar mapas del estado nutricional del cultivo (por ejemplo, de nitrógeno). En conclusión, la teledetección identifica patrones de variabilidad en el cultivo, complementando los datos de suelo.
Paso 2: Aplicación Variable de Nutrientes (VRT)
Una vez que se ha mapeado la variabilidad, la Tecnología de Tasa Variable (VRT) permite aplicar insumos de forma diferenciada. Existen dos metodologías principales:
- Aplicación Basada en Mapas:
- En este sentido, se crea un mapa de prescripción que indica la dosis exacta de fertilizante para cada zona del campo.
- La maquinaria está equipada con GPS, un controlador que lee el mapa y actuadores que ajustan automáticamente la dosis.
- Aplicación en Tiempo Real Basada en Sensores:
- Esta metodología es vital para el nitrógeno, un nutriente de alta movilidad. Sensores ópticos montados en el tractor miden la reflectancia del cultivo para calcular índices como el NDVI.
- Por lo tanto, un algoritmo calcula la dosis necesaria «sobre la marcha» y ajusta la aplicación en tiempo real, sin depender de un mapa previo.
La Gestión de Nutrientes 4R y sus Beneficios
La tecnología de precisión es clave para implementar el programa de Gestión de Nutrientes 4R, que busca aplicar la Fuente, la Dosis, el Momento y el Lugar adecuados.
- Beneficios Económicos: La rentabilidad aumenta por el ahorro de insumos (estudios estiman hasta un 18% en abonado nitrogenado) y por el aumento del rendimiento al aplicar la dosis óptima en las zonas de mayor potencial de producción.
- Beneficios Ambientales: Además, la aplicación precisa de nutrientes reduce el riesgo de contaminación de aguas subterráneas por nitratos. En conclusión, minimiza el exceso de insumos que puede ser lavado del suelo, facilitando el cumplimiento de normativas estrictas y contribuyendo a una agricultura más sostenible.